Ir al contenido principal

“Nada temas” [26/III/2022]

Teófilo, mi hijito, te escribo esta carta para traer a tu corazón mi amor materno, mi entrega total e incondicional a ti.

Mi Teófilo, nada temas, Iehosif y yo estamos aquí, jamás te abandonaremos, te amamos infinito, te amamos como Dios te ama, como Dios nos ama; nuestro amor es como el Amor de Dios; nuestro amor es misericordioso, es incondicional. Nada temas, Iehosif y yo estamos aquí, jamás te abandonaremos, pasa tiempo bajo nuestro manto, oculto a los hombres, visible a Dios. Nada temas, Iehosif y yo estamos aquí, jamás te abandonaremos, somos tus Padres del Cielo, somos los Padres de Agapito. No temas, Iehosif y yo estamos aquí, jamás te abandonaremos, te uniremos más estrechamente a nosotros y te llevaremos muy cerca de Agapito.

Hijito mío, mi vida está ligada con Dios, mi entendimiento y mi voluntad están ligados con Dios, mi intimidad está ligada con Dios, mi ser está ligado con Dios. Te quiero conmigo y como yo, ligado con Dios, que tu vida se vaya ligando más y más con Dios, que tu entendimiento y tu voluntad se vayan ligando más y más con Dios, que tu intimidad se vaya ligando más y más con Dios, que tu ser se vaya ligando más y más con Dios. Esta ligadura se da en la caridad, se da en la esperanza, se da en la fe; confía totalmente en Dios, espera totalmente en Dios, ama totalmente a Dios. Así estamos Iehosif y yo, y, así queremos que tú estés con nosotros, con Agapito, con Dios.

Teófilo, mi hijito, sé cristal que deje traslucir con tu vida; con tus palabras  y obras, la luz de Dios; no seas obstáculo, no seas opaco, sé puente, sé traslucido. Irradia a Agapito.

Maryam, Esclava del Señor, esposa de Iehosif y Madre de Agapito

Comentarios

Entradas populares de este blog

“José, con su vida, parece querer decirnos que...” [24/XI/2021]

“José, con su vida, parece querer decirnos que siempre estamos llamados a sentirnos custodios de nuestros hermanos, custodios de quien se nos ha puesto al lado, de quien el Señor nos encomienda a través de muchas circunstancias de la vida.” Audiencia General, 24/XI/2021, Papa Francisco • • • • Comentario ¿Soy yo el guardián de mi hermano? (Gen 4, 9). Ciertamente somos guardianes, custodios de nuestros hermanos, de todos y cada unos, sea quién sea. Todos estamos encargados del cuidado de todos, hemos de comprometernos todos con todos. Y todos somos custodiados y guardados por el Custodio, por el Guardián. Jesucristo es nuestro Custodio, nuestro Guardián. El aprendió esta tarea de su padre José encargado de custodiar y guardar a la Sagrada Familia, custodio y guardián de Jesús y María. Y Dios nos preguntará por nuestro hermano ¿dónde está tu hermano? (cf. Gn 4, 9) ¿le has cuidado? ¿le has cuidado como Jesús te cuida? ¿le has cuidado como Jesús le cuida? ¿te has preocupado por él? ¿te ha...

“Cristiano y satánico” [25/V/2022]

Muy querida Filotea, te escribo esta carta para recordarte la importancia del amor, que el amor me lo ha explicado todo. Mi Filotea, así se nos ha revelado Dios: Dios es Amor. Así pues, todas las acciones de Dios son actos de Amor. La Creación es acto de Amor de Dios; la Encarnación es acto de Amor de Dios; la Redención es acto de Amor de Dios; la Iglesia es acto de Amor de Dios... tú y yo, todos y cada uno de nosotros somos acto de amor de nuestros padres y acto de Amor de Dios. Filotea, hija mía, me detengo en ver cómo el Amor de Dios y el amor de las criaturas es un amor creativo y constructivo, que crea y que construye. El amor lleva a entregarse, entregarse lleva a servir, servir lleva a un amor mayor. Filotea, hija mía, me detengo en ver cómo el odio de las criaturas es odio destructivo, que destruye. El odio lleva a reservarse, reservarse lleva a servirse, servirse lleva a un odio mayor. Filotea, muy querida Filotea, es propio de los cristianos el cultivar en su corazón el amor ...

“Tiempo para Dios” [31/V/2022]

Teófilo, mi tan querido Teófilo, te escribo esta carta para recordarte que estoy vivo y te quiero vivo. Teófilo, vivo en el Sagrario, mi casa entre los hombres. Mas tengo contra ti y contra muchos el que no me visitáis lo suficiente. ¿Quieres vivir? Yo soy la Vida. ¿Quieres saber? Yo soy la Verdad. ¿Quieres ser bueno? Yo soy la Bondad. ¿Quieres contemplar lo bello? Yo soy la Belleza. ¿Quieres amar? Yo soy el Amor. Teófilo, ven a Mí y procura de pasar largos ratos conmigo: unos dialogando, otros callando; unos alegres, otros tristes; unos sonrientes, otros llorosos; unos gozosos, otros dolorosos... Así es, mi tan querido Teófilo, amor y cruz están unidos. El amor puro no es el que está en los momentos alegres y gozosos, sino el que ante todo está en los momentos tristes y dolorosos. Los momentos dolorosos y tristes son como las noches, solo son alumbrados por un puñado de estrellas y de la Luna, pocas estrellas y lunas, pues son pocos los que aman en la cruz. Los momentos gozosos y aleg...